Muerdo mi labio,
vago intento de
morder el tiempo,
por si de esta manera
te alcanza mi aliento
Despertar de tu ensoñación
-y de la mía-
de que me ves;
de que te gusto
y me gustas
no creyendo pedir tanto
-o si-
Sólo que la luna provoque
y las estrellas
brillen para los dos
y que te reciten
(allá donde estés)
de que alguien en la lejanía
muerde el labio-tiempo,
vago intento
de probarte
sin descuidar
tramos de tu piel
en los que detendría
mi lamento
-sin más-
…
Abres tus cielos azules
y me miras
en esas puestas de sol
que se me antojan distantes
aún siendo las mismas
©Ana López
Febrero 2013
No hay comentarios para estos versos que llegan tan dentro. Sigue escribiendo así. Un abrazo.
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