Me alcanza:
el sabor cercano de
ese café,
se emulsiona con mi
deseo de escribir,
y el desarrollo
extraño de mis sentimientos.
Siento:
mi corazón cómo late
urgente,
deseoso de declarar,
tantas formas…
Formas:
que tienen que ser anónimas,
porque yo lo decido
así,
porque mi alma lo
reclama así,
Puede:
que me convierta en
un ser peregrino,
caminando por
desiertos,
llenos de secretos,
con sueños
inconcretos;
que cada noche me
atacan.
Sin piedad:
los recuerdos me
rodean,
me dejan apresada.
En una vida moribunda,
asesinaría el pasado,
con el cuchillo del
ahora,
para dejar limpio el mañana.
El tiempo:
Sí, me obsesiona el
tiempo,
tan rápido, tan lento,
siempre cruel…
Me acaricia:
la esencia de ese
café;
lo tomaré despacio,
- ya estará frío
como mi hacer-
mas no como mi
sentir,
que inunda todo mi
espacio.
Me encantan tus poemas, Ana! :)
ResponderEliminar¡¡me alegro Juan!! a mi también los tuyos. ¿Tú has publicado?
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