No quiero
que se me arrugue el alma
no dejaré que la vida
la digiera
en digestión infinita
y la desmenuce
con tanto dolor
No quiero cederla
para que cualquiera
la use
como periódico viejo
ahora,
que aún soy consciente de ella
porque puedo perderla
en cualquier calle
con nombre
de amor impronunciable
La prensaré
entre mis sueños
la conservaré
sin curarla
pues no puedo
aún con esfuerzos sanarla
Dejaré sus cicatrices
así, intactas
pero hoy no quiero
que se me arrugue el alma
más, no.
©Ana López
Agosto 2013
Precioso amiga ANNA ,eres una gran poetisa ,besos
ResponderEliminar¡Gracias Mont! me alegro que te guste, compañera de letras
Eliminar